El dermatólogo de Clínica Alemana Osorno, Dr. Eric Ojeda, comparte información crucial sobre la creciente incidencia del cáncer de piel y ofrece claves para la detección temprana y el autocuidado. El cáncer de piel, impulsado por la exposición solar excesiva y otros factores, ha experimentado un significativo aumento en las últimas dos décadas en Chile y en el mundo.
La exposición prolongada al sol, especialmente durante las horas de mayor radiación ultravioleta, unido al escaso uso de protector solar fuera del verano y factores genéticos, ha contribuido al preocupante incremento del cáncer de piel.
Según la OMS, la tasa de esta enfermedad en Chile ha pasado de 20 a 25 casos por cada 100.000 habitantes, situándose entre los cánceres más frecuentes en la población chilena.
El Dr. Eric Ojeda, dermatólogo de Clínica Alemana Osorno, comparte claves para la pesquiza temprana y el cuidado preventivo.
Cáncer de piel
La incidencia del cáncer de piel ha experimentado un aumento significativo en las últimas dos décadas, convirtiéndose en una preocupación de salud pública en Chile y a nivel global.
La exposición excesiva al sol, especialmente durante las horas pico de radiación ultravioleta, se suma al hábito insuficiente de utilizar protector solar fuera de la temporada estival, contribuyendo a este fenómeno.
Además, factores genéticos, como:
- Tener pieles más sensibles, se han identificado como elementos que aumentan la predisposición a desarrollar esta enfermedad.
Aumento de casos
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la tasa de cáncer de piel en Chile ha aumentado de 20 a 25 casos por cada 100.000 habitantes, colocándolo entre los cánceres más prevalentes en la población chilena.
La OMS advierte que uno de cada 10 chilenos podría enfrentarse a algún tipo de cáncer de piel a lo largo de su vida.
El Dr. Eric Ojeda, dermatólogo de Clínica Alemana Osorno, enfatiza la importancia de la detección precoz para combatir este tipo de cáncer.
Prevención y autocuidado
Hace hincapié en que la prevención y el autocuidado son esenciales para reducir el riesgo y mejorar las posibilidades de tratamiento exitoso.
Principales Claves:
Factores de Riesgo: Las personas con mayor predisposición a desarrollar cáncer de piel suelen ser aquellas expuestas constantemente al sol, con piel clara, rubias o pelirrojas. Antecedentes de quemaduras solares, especialmente en la infancia, aumentan el riesgo. También se incluyen aquellos con más de 50 lunares, inmunosuprimidos o trasplantados, y aquellos con antecedentes familiares de cáncer de piel.
Tipos de Cáncer de Piel: El carcinoma basocelular es el más frecuente, mientras que el melanoma, aunque menos común, es más peligroso y potencialmente mortal.
Señales de Alerta: Cualquier mancha o lunar que sea asimétrico, tenga bordes irregulares, más de dos colores, diámetro mayor a 5 mm o presente evolución en tamaño o forma, debe considerarse sospechoso.
Tratamiento del Melanoma: El tratamiento del melanoma varía según su estadio. En etapas iniciales, la cirugía puede ser suficiente, pero en casos más avanzados, puede requerir tratamiento sistémico.
Recuperación: Un diagnóstico precoz del melanoma permite un tratamiento exitoso y una buena sobrevida para los pacientes.
Chequeos Médicos Preventivos: Se recomienda acudir a un dermatólogo para revisar la piel y evaluar posibles riesgos de cáncer de piel. La revisión de lunares debe realizarse anualmente, y en personas con factores de riesgo, la frecuencia será mayor.
Medidas de Prevención: Evitar la exposición solar excesiva, especialmente entre las 11:00 y las 16:00 horas, buscar sombra, usar lentes de sol, sombrero y protector solar con FPS 30 o superior son medidas esenciales. Se desaconseja el uso de camas bronceadoras o solarium, así como el tabaquismo, que también aumenta el riesgo.
La atención temprana y el cuidado preventivo son cruciales para combatir el cáncer de piel.